martes, 23 de agosto de 2011

La membrana permeable

La vida según Ileana Olmos:

La vida se resume a ignorar lo que te hace daño, dejarlo que se vaya, vivir el presente, apreciar lo que tienes y lo más importante aceptar lo que no es ¿cómo? Colocándolo en el pasado y dejándolo atrás.

"Cara no volverte a ver, Cruz quererte para siempre"- Melendi.

No puedo culparte soy un completo desastre. Y ya estoy aterrada pensando si seré siempre esta misma mujer. Algunos dicen que soy joven, mi mente es algunos años mayor aunque mi cara y mi estatura aleguen lo contrario.

¡Esto no es para mí! Desde que conocí el amor, conocí una parte de mí que no me gusta. A veces pienso que tal vez te enamoraste de mi dolor y yo de tu poder para hacerlo desaparecer, sí ese que no sabías que tenías. Eras mi complemento, eres un amor perdido, serás un hombre comprometido.

“Yo desaparezco en la persona que amo, yo soy la membrana permeable, si te amo te entrego todo: mi tiempo, mi cuerpo, mi dinero, mi perro, el dinero de mi perro y proyectaré en ti muchas cualidades que nunca cultivaste en ti mismo. Te daré eso y más, hasta estar tan agotada y disminuida que la única manera de recuperarme será enamorándome de alguien más”-Elizabeth Gilbert-

Eras un extraño que veía más en mí misma de lo que yo podía hacerlo. Te convertiste en un tú que se enamoró de mis torpezas, de mis inseguridades y de mis desajustes hormonales. Eras un seductor irresistible. Un hombre del cual jamás necesité entender su modus operandi, sus motivaciones ni su estructura cognitivo/afectiva. Menos jugar con tu testosterona, realmente eras alguien para involucrarse.

Te doy permiso de burlarte de mí, aunque debes pensar que soy demasiado encantadora para hacerlo (sonrisa). “Una mujercita encantadora que no sabe lo que quiere”, así lo dijo Leopoldo cuando le pregunté: ¿Qué piensa Santiago de mí? Luego de contarle cuando recientemente me dijiste lo siguiente:

"Si realmente hubiéramos llegado a estar juntos, te hubieras dado cuenta de que dicha perfección no existe... De hecho es tan relativa, que sólo está dentro de nuestros cerebros y se la otorgamos a quien nosotros elegimos, aunque más que un regalo es una condena".

Leo es totalmente heterosexual, pero te ama como un gay. Sin conocerte.

-Encuentro con la pitonisa, en un tren- la Gata, digamos que una mujer joven y cartomante. ¡Mucho Gusto, tú no me conoces soy la Gata! Vine a traerte un mensaje: “Él también te piensa”, dijo.

Sonreí y en un instante recorrí 458 km llorando por un amor perdido.

La Gata lo describió como un hombre mundano, con mucha experiencia y como lo dije anteriormente un seductor irresistible. De naturaleza emotiva, amante de lo bueno, se expresa como un pensador, cargado de inspiración, físicamente es blanco, de sangre extranjera y casi calvo, pero tengo que asegurarte que cada pelo perdido es un derroche de locura que lo ha vuelto cada vez más encantador, dijo.

Pregunté si volvería a verlo, a lo cual la Gata respondió que nos encontraríamos de nuevo, pero cuando dejara de esperarlo. “No te prepares nena, cuando se encuentren ambos sentirán esa magia del primer encuentro”. Pero como no esperarlo, si no paro de pensar en él, dije. -Fin del encuentro-

Por vez primera estaba maravillada ante un ser humano. Ya no se trataba de una obra de arte ni siquiera un libro pudo cautivarme de esa manera. No era la torre Eiffel eran carne y huesos.

Mi error está en que vivo esperando. Tengo que dejar de buscarte. De buscarte en el supermercado, en mis citas con el ortodoncista, en una tumbona en la isla de Margarita. ¡Hombre, que hasta conocí un español en este último viaje! Se llamaba Eric, era de Barcelona y me invitó a jugar al volley ball y a lanzarme de bomba en la piscina. Pensé en ti cuando luego de una foto me dijo “Ay que guay”. Recuerdo cuando me explicaste el significado de guay y molar. Ese es mi problema, que te recuerdo.

Me la he pasado esperándote y creyendo en lo imposible. Quiero que toques el timbre, que mi celular suene con una llamada tuya, un mensaje, un correo. (Actualización: el correo ya lo recibí) Aclaro: que me toques el timbre me saltes encima y me des un abrazo y un beso, que mi celular suene y me digas 3 palabras y 8 letras y un mensaje con día, hora y fecha para verte.

¡Y nada! Es que no va a pasar nada, es que mi amiga Daria me abrió los ojos y me dijo: J, vives en una película.

Te respeto. Estás feliz. No soy una zona en reclamación sino más bien un campo minado, vengo con peligro de extinción contagioso, soy una bomba nuclear. No te juzgo, pero te dejo ir Santiago, no puedo seguir abrazándote y tomando el té todos los días.

Si algún día nos volvemos a topar por el camino, déjame algo más y menos doloroso que las ganas de extrañarte.

Sin embargo, tengo que agradecer que no viví esa etapa tormentosa de una relación amorosa contigo, esa donde me hacía adicta a ti y tú te negabas. Donde me volvía flaca y me sentaba llorosa en una esquina temblando, deseando solo tenerte una vez más. No discutimos, no sentiste repugnancia por mí, nunca necesitaste espacio y jamás me diste esa mirada que me hacía sentir irreconocible y sobre todo esa que te lleva a perder el norte, esa que te empuja a la devaluación completa y sin misericordia de ti mismo. ¡GRACIAS! Y es mera gratitud, sin toques de ironía.

Gracias por haberme hecho sentir amada y segura. Te lo repito, eres un gran hombre. Serás un buen esposo que cuidará bien de su mujer y acostará a los niños con un beso en la frente y un cuento. Fui feliz viéndote y siendo parte de ti, de tu vida.

Solo me dejaste sonrisas, ganas, ganas y más ganas. Pasión, chispas y buenos momentos y lo más importante: me dejaste siendo la persona que quiero ser. Me dejaste lidiando conmigo misma, como tiene que ser.

Te quiero y estoy orgullosa de ti.

Baccio y Perfetto.

PD: te dejo una canción que “espero te deje un buen sabor en la boca”. –Echarte a suertes de Melendi-.

PD2: Cuando me veas de nuevo no llevaré un vestido muy colorido, como anaranjado. Llevaré una falda roja (como la primera vez), con tacones del mismo color, con esta canción de fondo y por favor dame un beso.

PD3: “Pero no volverte a ver hace llagas en mi piel y el quererte para siempre no me lo pidas mujer. Que cuanto más libre esté más me querrás tú, más yo te querré”.

2 comentarios:

  1. wow es curioso pero me recordo a mi historia de amor y el final me hizo pensar que quizas asi deveria tomar las cosas, es dificil a veces creo que estoy loca de querer tanto a una persona que vive del otro lado del mundo pero la verdad es que muy en el fondo, se que nuestras miradas se volveran a cruzar. me encanto tu escrito!

    ResponderEliminar
  2. espero estes mejor.. :)

    ResponderEliminar